
Durante todo el mes de septiembre, la Iglesia celebra el Mes de la Santa Biblia y presta especial atención a la Palabra de Dios contenida en las Sagradas Escrituras.
Septiembre es considerado el mes de la Biblia (palabra griega que significa libros), debido a que el 30 de ese mes, es el día de San Jerónimo el que tiene nombre sagrado, y que de acuerdo a la historia fue un hombre que consagró toda su vida al estudio de las Sagradas Escrituras, y fue quien estudio y realizó la traducción de la Biblia al Latín.
En este sentido, desde el DeNAPBi (Departamento de Animación y Pastoral Bíblica de la Conferencia Episcopal Argentina) se ha publicado un subsidio para animar encuentros de lectura orante o lectio divina de los grupos o círculos bíblicos de las parroquias y de diversas instituciones, o de particulares que lo soliciten.
Rezando el lema “La Palabra que edifica”, este año el subsidio se concentra sobre dos ejes fundamentales: el libro de los Hechos de los Apóstoles y la sinodalidad, tema fundamental este último, que el Papa Francisco propuso a la Iglesia y sobre el que vienen reflexionando, desde el año pasado, todas las diócesis argentinas.